El Ayuntamiento actuará para impermeabilizar la terraza de Legarre 8 y terminar con las filtraciones en los garajes
La obra cuenta con un presupuesto de 479.752 euros. Las filtraciones desde la cubierta, usada como frontón y acceso a un centro, han dañado techos y paredes del aparcamiento subyacente.
El Ayuntamiento de Eibar ha puesto fecha de caducidad a los persistentes problemas de humedades y filtraciones en el edificio de garajes de Legarre 8. La solución, radical y definitiva, pasará por demoler y reconstruir por completo la terraza transitable que actúa como techo del aparcamiento. El Consistorio invertirá 479.752,71 euros en un proyecto de impermeabilización integral que acabará con unas goteras crónicas que han dañado los techos y tabiques de las 63 plazas de garaje.
Los estudios técnicos han confirmado que la terraza, que alberga la cancha de frontón y es la entrada principal al Centro Egogain, es la culpable de los problemas. Su estado, con pendientes casi inexistentes e incluso negativas, impide que el agua de lluvia se evacue correctamente, estancándose y colándose a través de la junta de dilatación hasta el interior del garaje. Gran parte de la superficie tiene pendientes inferiores al 0,2%, lo que es insuficiente para evacuar el agua. Esta situación ha generado daños visibles en el revestimiento de techos y paredes del garaje, además de un desplazamiento de la fachada hacia la calle Legarre.
El alcalde de Eibar, Jon Iraola, ha dejado claro que la intervención es ineludible: "Ante una patología constructiva como esta, no hay lugar para medias tintas. Vamos a actuar con contundencia para devolver la seguridad y salubridad a este espacio. Los casi 480.000 euros de inversión son una partida necesaria para resolver el problema".
El concejal de Obras, Pedro Escribano, ha señalado que "los trabajos de impermeabilización de la terraza no afectarán en ningún momento a la evacuación de los ocupantes del garaje ni a los del Centro Egogain. La seguridad durante la obra está garantizada".
La solución adoptada es integral. No se limitará a poner una nueva capa aislante, sino que implicará la demolición de todo el pavimento y los recrecidos del nivel inferior para construir uno nuevo con las pendientes adecuadas (superiores al 1,5%). Sobre este se colocará una doble lámina asfáltica y un nuevo pavimento de hormigón impreso. La rampa y las escaleras que conectan los dos niveles de la terraza también se reconstruirán para facilitar el mantenimiento de la junta de dilatación, el punto crítico por donde más agua se filtra.
