Adjudicadas definitivamente las obras de construcción del bidegorri Eibar-Maltzaga
El departamento de Movilidad y Ordenación del Territorio de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha adjudicado definitivamente los trabajos de construcción del bidegorri Azitain-Maltzaga a dos UTEs de empresas que se encargarán cada una de un tramo de los dos en los que se divide el proyecto. La UTE MURIAS – AMENABAR será la responsable de la construcción del tramo más próximo al núcleo urbano de Eibar, que tiene su inicio en el barrio de Azitain, mientras que la UTE CAMPEZO – IZA – ESTRUMAR construirá el tramo que conecta con Maltzaga y que incluye varias pasarelas.
De este modo, los trabajos de construcción del bidegorri Azitain-Maltzaga, un tramo de casi dos kilómetros y con un presupuesto de 5,1 millones de euros, arrancarán en las próximas semanas, una vez concluido todo el proceso administrativo con la adjudicación de la dirección de obra y la firma del acta de replanteo.
En palabras del Alcalde, Miguel de los Toyos, “esta es, sin duda, una grandísima noticia para la ciudad. Tras más de una década reivindicando este bidegorri, tras el trabajo y compromiso de este Ayuntamiento, tras la recogida de más de 10.000 firmas de la ciudadanía eibarresa a través de la Escuela de la Experiencia, y tras la receptividad, comprensión y apuesta personal de la Diputada de Movilidad, Marisol Garmendia, hoy, podemos decir que el bidegorri Eibar-Maltzaga será una realidad el año que viene.”.
El departamento de Movilidad y Ordenación del Territorio, que dirige la diputada Marisol Garmendia, ha impulsado este proyecto de vía ciclista y peatonal “demandado históricamente por la ciudadanía eibarresa, logrando completar un trazado de bidegorri complejo, que será un hito en la movilidad sostenible y saludable de Eibar y de la comarca de Debabarrena”, tal y como señala la diputada Garmendia.
Dadas las dificultades técnicas y tras haber estudiado varias alternativas, el bidegorri contará con 5 pasarelas, dos de ellas con más de 80 metros de longitud, que cruzarán el río Ego por un lado y el río Deba y la carretera GI-627 por otro. El trazado, que dispondrá de aproximadamente dos kilómetros de longitud, tendrá una anchura que rondará los 3 metros prácticamente durante todo su recorrido, un espacio suficiente para que bicicletas y peatones compartan el espacio de manera cómoda y segura.