Cambiar a contenido. | Saltar a navegación

El Ayuntamiento de Eibar diseña la hoja de ruta hacia un nuevo modelo de centros sociales de personas mayores en base a un proyecto participativo

Imagen de archivo del Hogar del Jubilado de Untzaga.

Imagen de archivo del Hogar del Jubilado de Untzaga.

14/12/2023

La iniciativa Helduak Zabaltzen, impusada por el Gobierno Vasco y Euskofederpem, ha analizado durante el último año y medio la situación, las necesidades y los retos de los Centros de Mayores de Eibar. El estudio concluye la idoneidad de un nuevo modelo de centro, basado en la cogobernanza y la participación, que implicaría la creación de comisiones de trabajo y una figura dinamizadora, entre otras novedades.

La iniciativa Helduak Zabaltzen, impulsada por el Gobierno Vasco y Euskofederpem (Federación Vasca de Personas Mayores) para facilitar la transformación de los Centros Sociales de Personas Mayores y acompañar su digitalización, ha analizado el funcionamiento, las necesidades y los retos de los Centros Sociales de Mayores de Eibar. Los propios Centros, la coordinadora Biztu y el Ayuntamiento habían identificado la necesidad de acometer un proyecto de transformación, por lo que la localidad fue elegida para una de las primeras experiencias piloto del programa. Así, durante el último año y medio se ha realizado un proceso participativo, cuyas conclusiones permitirán al Ayuntamiento diseñar la hoja de ruta hacia un nuevo modelo de Centros de Mayores.

Los Centros Sociales de Personas Mayores son un recurso fundamental para la relación, la participación en actividades socioculturales, la promoción de la salud o la participación en la vida comunitaria de las personas mayores. Para seguir cumpliendo su función deben adaptarse a las nuevas realidades, fruto de los cambios culturales, sociológicos o tecnológicos. Una necesidad común a todos los centros sociales pero que en este caso se ha estudiado atendiendo a la especificidad de Eibar. De ahí la importancia de que se haya desarrollado un proceso participativo desde abril de 2022, en el que han participado personas integrantes de los cuatro Centros de Mayores de Eibar (Beheko Tokia, Ipurua, Unzaga y Urki), la coordinadora Biztu y el Ayuntamiento. El proceso ha dejado patente la necesidad de una transformación para adecuar los centros a la realidad presente y futura.

El estudio ha identificado siete retos principales, enfocados en la organización, las actividades, los servicios, la comunidad, la brecha digital, la diversidad y el edadismo. Se trataría de lograr una gestión más participativa en los centros, con modelos de cogobernanza, conocer los intereses de las personas mayores para organizar actividades adecuadas a sus inquietudes, identificar los servicios necesarios y la forma de coordinar los centros, tejer redes con el resto de los recursos municipales, facilitar el uso de las nuevas tecnologías, gestionar la diversidad y reducir la visión estereotipada de los Centros sociales y las personas mayores. Todo ello a través de diferentes acciones, detalladas en el estudio, como redefinir los procesos de entrada para conocer mejor las inquietudes de las personas usuarias, facilitar la participación en los equipos directivos u organizar jornadas de puertas abiertas.

Un nuevo modelo basado en la cogobernanza y la participación

Con todos los datos en la mano, se propone la implantación de un nuevo modelo de Centro Social basado en la cogobernanza y la participación, agilizando y fortaleciendo la gobernanza, con el peso de la profesionalización dentro de la misma y que sirva como herramienta para hacer frente al resto de retos planteados. Este nuevo modelo de funcionamiento se cimentaría en cuatro pilares fundamentales: la constitución de una única asociación de personas mayores, la creación de comisiones de trabajo y de una figura dinamizadora y la definición de un proceso de acogida.

Así, las cuatro asociaciones existentes hoy en día, una por cada Centro Social, se unificarían y contarían con una Junta directiva con representantes de todos los centros. Con esta unificación se evitaría la competitividad entre Centros, se reducirían los gastos económicos, disminuiría el desgaste personal de las personas voluntarias, se equilibraría la oferta entre todos los centros y se unificarían precios.

Con la creación de las comisiones de trabajo, por su parte, se promovería la participación de personas ajenas a la Junta en tareas que actualmente realiza la propia junta y se impulsaría la participación en temas que pueden resultar de interés a personas que participen sin el compromiso de tener que formar parte de la Junta. Participarían en la co-gobernanza de cada centro definiendo e impulsando acciones y actividades. En principio, estas comisiones trabajarían en cuatro ámbitos: psicosocial, excursiones, charlas y recreativos. La figura dinamizadora intercentros, de carácter profesional, contaría con dos objetivos fundamentales, apoyar en aspectos técnicos a la Junta directiva y favorecer una gestión más participativa.

Por último, se establecería un nuevo proceso de acogida más formal y estructurado que favoreciera conocer en profundidad los intereses y talentos de las nuevas personas usuarias, facilitando así su participación.