Eibar celebrará el XXIII Alarde de Txistularis con la participación del Orfeón Donostiarra en el 90 aniversario de su banda
Más de 150 músicos, dantzaris y coralistas llenarán de música y emoción la plaza de Unzaga el 15 de junio.
Eibar celebrará el próximo 15 de junio, a las 12:30 horas, en la plaza de Unzaga, el XXIII Alarde de Txistularis, un evento muy especial enmarcado en las fiestas de San Juan que servirá para conmemorar el 90 aniversario de la creación de la primera Banda de Txistularis de la localidad.
El acto contará con una amplia representación artística y cultural, entre la que destaca la presencia del Orfeón Donostiarra, uno de los coros más prestigiosos del panorama internacional. Junto a él actuarán Usartza Txistulari Taldea, alumnos de txistu de la Musika Eskola de Eibar, el quinteto de metales, percusionistas y teclistas locales, así como los grupos de danza Kezka y Neledantza.
La actuación incluirá un repertorio variado que combinará melodías populares con composiciones de Mikel Laboa, Kalakan, Vangelis o Ennio Morricone, en un espectáculo pensado para emocionar, sorprender y reivindicar la riqueza del folklore vasco.
“Este Alarde es un homenaje a quienes durante generaciones han mantenido viva la música del txistu en Eibar. Forma parte de nuestra identidad como ciudad”, ha señalado el alcalde Jon Iraola, quien ha querido poner en valor “la pasión y el esfuerzo de Usartza Txistulari Taldea, que ha sabido mantener esta tradición incluso en tiempos difíciles”.
Por su parte, el concejal de Cultura, Andoni Zabala, ha destacado “el valor simbólico de este aniversario”, y ha animado a la ciudadanía a “acudir y apoyar una cita que une historia, música y sentimiento colectivo”.
La historia del txistu en Eibar se remonta a 1566, con la aparición del primer tamborilero local, Antón de Ybarra. En 1935 se constituyó la primera Banda de Txistularis tal y como la conocemos hoy, con músicos como León Laspiur o Sabino Barrenetxea. En 2001, se fundó Usartza Txistulari Taldea, agrupación que ha tomado el relevo y que hoy continúa activa, a pesar de los retos.
“Cumplimos 90 años desde la fundación de la primera banda, y aunque seguimos adelante con ilusión, necesitamos relevo. Es urgente que las nuevas generaciones se acerquen al txistu, que conozcan su valor y se animen a aprenderlo”, explican desde la agrupación, que rinde homenaje también a la que fue su directora, Elena Pérez, fallecida.
El concierto del día 15 servirá también como reconocimiento al trabajo del alumnado de la Musika Eskola, que durante meses ha ensayado intensamente para preparar esta cita, y como ejemplo del trabajo colaborativo entre agrupaciones, instituciones y ciudadanía.
Eibar, que no celebraba un Alarde de Txistularis desde 2017, recupera así una de sus tradiciones más sonoras.
